martes, 4 de noviembre de 2014

Luis Miguel en Córdoba: The Hits Tour en Orfeo Superdomo

El artista mejicano visitó recientemente nuestra ciudad en el marco de la gira The Hits Tour que presentó en nuestro país.

Luego de un recital poco feliz en escenarios porteños, el cantante romántico llegó a Córdoba para enamorar a sus infaltables fans. Aquellas que le hicieron el aguante el miércoles a la noche, cuando iba a presentar su primer show en suelo cordobés, luego de 2 años de ausencia.

El espectáculo previsto para las 21.30 del miércoles 29 tuvo que suspenderse debido a que el Rey no pudo abordar su jet privado proveniente de Buenos Aires, por las malas condiciones meteorológicas que azotaron a la ciudad.

Sus seguidoras llegaron desde varias provincias y localidades vecinas a la capital cordobesa, para encontrarse con la mala noticia: el show se reprogramaba para los días 30 y 31 de octubre en el Superdomo Orfeo. Tristeza, desánimo, malas caras, un poco de insultos y malhumor, nada pudo opacar la pasión y admiración que las mujeres de Luismi sienten por el artista.

El jueves 30, con media hora de retraso, el show se pudo disfrutar a pleno. Las “incondicionales” chicas del Rey vivieron con entusiasmo y muy buena vibra el espectáculo de la estrella del bolero. En el escenario actuó junto a su prestigiosa banda, una corista y pantalla gigante con fotos y vídeos de los mejores tiempos físicos de Luismi.

No hay dudas sobre el carisma y el talento que Luis Miguel mantiene sobre el escenario. Los mas de 30 años de carrera lo han convertido en el romántico más preciado de los últimos tiempos. Luis Miguel sabe cómo enamorar y mantener contento a su público. Con todos los guiños de una auténtico seductor, hace delirar con la mirada y con su voz, un privilegio que solo tienen algunos genios. Es que Luismi es uno de los pocos cantantes en el mundo que puede abarcar varias octavas con su voz. Igualado por la memorable Whitney Houston, solo por nombrar un artista.

En el nuevo show de Luis Miguel, se presentaron temas inéditos y en el cierre interpretó su último single “Deja Vú”, donde el artista vuelve al pop y los ritmos movidos, estilos con los que se hizo famoso en sus primeros años de carrera.

El mejicano tuvo tres cambios de vestuario, pasando de lo super formal con traje y corbata para terminar con sus clásicas remeras negras ajustadas a su estilo corpulento.
El público cantó y aplaudió de pie cada unas de sus canciones, mientras recibía las miradas del divo sobre el escenario. Luismi, agradeció varias veces a su público presente, no hizo mención de la suspensión de la función del 29 de octubre, y les pidió permiso para interpretar el cancionero lento. Momentos en que el recital se vuelve íntimo y el Rey despliega todo su arte de seducción. 
Cómo no perdonarle al Rey su faltazo de la primer noche, pues él con sólo una nota de su voz y una mirada, enamora a su fiel público, mayormente femenino.
También se observó público masculino, acompañando y cantando las canciones. Quizás buscando y memorizando letra para alguna ocasional cita.

La lluvia de papelitos metalizados anunciaba el fin del espectáculo, las mujeres daban sus últimos suspiros y felices abandonaban las butacas del Orfeo. Atrás quedó el mal recuerdo de la función suspendida y casi todas se retiraron bamboleando su globo rojo, ícono del amor que sienten por su ídolo.

Ya de vuelta en un taxi, (camino a una fiesta postergada), el conductor me preguntó:
-“..Y?.. Qué les regaló 
Luis Miguel?”.
-”Simplemente su voz. ¡No hace falta nada más!”.

Por Silvana Lovato